Musica: ''ADIOS A JULIAN PLAZA''
Postato il Tuesday, 22 April @ 12:15:00 CEST di vamos
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El Creador de "Danzarin" y "Nostalgico" Bandoneonista, pianista y
compositor, fue arreglador musical de Troilo y de Pugliese (texto en español)
.
El músico Julián Plaza, compositor de
algunos de los más bellos tangos y milongas de los años 50 y 60, murió el
sábado. Fue el desenlace de una larga enfermedad que sólo en los últimos meses
lo alejó del trabajo.
Plaza nació el 9 de julio de 1928 en General Manuel
Campos, provincia de La Pampa, y a los 15 años debutó en Buenos Aires como
bandoneonista de la orquesta de Edgardo Donato. Actuó con la orquesta de Antonio
Rodio, formó parte de la infructuosa rentrée europea de Eduardo Bianco, tocó con
Miguel Caló y Carlos Di Sarli, y fue reclutado por Osvaldo Pugliese en 1959. "Lo
recuerdo como el año del vértigo. Fue como una película donde todo sucedía tan
rápido que sólo después de un tiempo se podía saber de qué se trataba", contó en
una entrevista evocando el breve lapso en el que se precipitaron su ingreso a la
orquesta como instrumentista, su incorporación como arreglador, y una inmensa
gira por Rusia y China.
Una década más tarde, Plaza desertó de las filas
de Pugliese junto con algunos de sus compañeros para fundar el Sexteto Tango.
Entonces no dudó en abandonar el bandoneón —en el Sexteto formaban Osvaldo
Ruggiero y Víctor Lavallén— para hacerse cargo de la vacante del piano, que
también dominaba. Con el sello de Pugliese, el Sexteto Tango alentó una larga
trayectoria hasta hoy, pero Plaza se alejó del grupo en 1992 con la intención de
dar una demorada oportunidad a su vocación de director, muchas veces postergada
en beneficio de su trabajo como arreglador de las orquestas de otros.
La
trascendencia de Julián Plaza se cifra en su obra como compositor y en sus
arreglos. Su producción de tangos y milongas reúne virtudes poco corrientes.
Parte de una generación signada por el peso de Astor Piazzolla, Plaza logró
desarrollar un nítido camino propio y se ubicó entre los grandes nombres del
género. Una sucesión singularmente pareja de piezas como Danzarín,
Melancólico y Nostálgico trazó su inconfundible marca de estilo.
Además, Plaza sintió predilección por la milonga, género frecuentemente
devaluado que él contribuyó a enriquecer con la calidad de un moderno Piana, con
obras como Nocturna o Payadora.
Tuvo momentos igualmente
inspirados en la discreta tarea de arreglar para otros directores —tarea que
parecía de acuerdo con una personalidad como la suya, poco afecta al
protagonismo—. "En mis primeras épocas observé la claridad de los arreglos que
presentaban Héctor Stamponi y Astor Piazzolla", recordó a propósito de sus
inicios, alrededor de 1950. Para Troilo arregló, entre otras, ocho piezas
propias. La versión de La mariposa (de Pedro Maffia) que elaboró para la
orquesta de Pugliese, es uno de los ejemplos más claros del modo en que un
arreglo puede iluminar un tango.
Siempre al frente de proyectos
musicales, siempre en actividad como directivo de Sadaic, en los últimos años
Plaza había recibido algunos reconocimientos formales, premios como el ACE de
Oro, en 1997. "Son lindos, así a uno le conocen la cara", declaraba el pampeano
en esas ocasiones con una cortesía distante. "Pero yo he sido siempre de perfil
bajo, y no tengo edad para cambiar", solía decir. Raramente abandonaba en
público esa actitud amable y circunspecta.
Irene
Amuchástegui.(Clarin)
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