El
desafío de las obras propias
Por Diego Jemio
Fuente: Clarin
Son una de las mejores agrupaciones de
la actualidad. Hacen tango instrumental. Hablan del estigma Piazzolla y
del momento que atraviesa el género
hoy |
Difícil la misión que se propuso La Camorra: darle al tango
instrumental una nueva mirada en la era post Piazzolla, que significa para
muchos una carga difícil de digerir.
Sin embargo, Luciano Jungman
(bandoneón), Sebastián Prusak (violín), Nicolás Guerschberg (piano), Jorge Kohan
(guitarra) y Hugo Asrin (contrabajo) navegan desde hace 13 años las aguas de lo
que en otra época fue algo así como la vanguardia del tango. Con composiciones
propias, el grupo acaba de lanzar el quinto disco 12 Postales, que presentarán
esta noche en el ND Ateneo.
En diálogo con Clarín, Jungman, Guerschberg
y Kohan se refirieron a la impronta de Piazzolla, al momento de renovación del
tango y a animarse a hacer un disco con temas propios.
Al
principio, los discos del grupo tenían obras de Piazzolla y Troilo. ¿Por qué
decidieron abandonar a esos compositores y hacer un disco sólo de obras
propias?
Kohan: Fue un proceso lento. Primero, incluimos
algunas obras de Luciano (Jungman) a discos con tangos de Piazzolla y otros más
tradicionales. Y ahora nos largamos sólo con piezas propias. El objetivo
finalmente es lograr un estilo propio, tanto en las composiciones como en la
interpretación.
¿Es difícil hacer tango contemporáneo con la
impronta de Piazzolla?
Guerschberg: El tipo nos obligó a
estudiar. Su obra fue tan fantástica y tan revolucionaria que resulta difícil
digerir su impronta. Pese a que es una gran influencia para nosotros, nunca
pretendimos continuar con su obra ni ser herederos de su música. Intentamos
hacer la música que sentimos, que suene bien y que esté bien escrita.
Jungman: Sabemos que arriesgarnos a hacer un disco con obras
propias nos pone en un listón alto. Pero desde hace varios años venimos
intentando hacer nuestro camino.
De todas formas, hay un cierto
movimiento de compositores de tango en la Buenos Aires de hoy...
Kohan: Claro que hay. Están apareciendo una gran cantidad de
compositores. Hace 13 años, cuando comenzamos, era raro encontrar pibes de 20
años que pretendieran escribir tangos. Ahora todo es distinto: siento que
estamos en un momento interesante y productivo.
Jungman: Ese
crecimiento del tango a veces suele ser desparejo; por ejemplo, ahora hay más
compositores, pero menos letristas. Pero creo que vamos por el buen
camino